Xmanikté, así es una de las técnicas de bordado más antiguas de Yucatán
Por la dificultad, la falta de manos que sepan realizarlo y el alto costo para venderlo están poniendo en riesgo de desaparecer este bordado milenario
MÉRIDA, Yucatán.- El Bordado Maya es uno de los tesoros más importantes para la cultura yucateca. De acuerdo con el Instituto Yucateco de Emprendedores (IYEM), en el estado hay alrededor de 100 mil mujeres bordadoras y se tienen registradas 29 puntadas a mano de las 35 que hay en todo México.
Hallazgos en el Cenote Sagrado de Chichén Itzá confirman que estos bordados ya eran comunes en la época prehispánica, pues en su interior se encontraron restos de telas carbonizadas bordados con el chuuy kab o bordado de mano, conocido en los libros de bordado como “punto de satín”.
Entre los muchos tipos, existe uno que resalta entre los demás, se trata del Xmanikté. También conocido como flor siempreviva, es considerado un verdadero patrimonio de la cultura maya de Yucatán, que es un posiblemente una herencia de los antiguos mayas.
Ya sea Xmanikté o Xmanikbeen, que quiere decir perpetuidad, ambos nombres hacen referencia a algo que no muere. Pese a esto, es una puntada en peligro de desaparecer por la dificultad de su elaboración y al ser pocas las bordadoras que lo hacen hoy en día.
Ver nota: En Yucatán, aproximadamente 100 mil mujeres se dedican al arte del bordado
¿Qué hace tan especial al Xmanikté?
Esta técnica es un bordado realizado sobre deshilado. No se encuentra registrada en ningún libro y todo indica que es una puntada de origen prehispánico que solo existe en Yucatán. Por esta razón se puede considerar que se trata de un bordado endémico.
Se podría argumentar que no había bordado “deshilado” en la antigüedad. Pero aunque no era auténtico deshilado, porque no se deshilaban las telas, sí se construían las condiciones en la urdimbre y unir hilos, de modo que se formaban ojillos.
Esto usando agujas de hueso o madera, que parecen deshilados. Las telas carbonizadas de Chichén Itzá son claro ejemplo de lo que digo, ya que muchas tienen “deshilado”. Actualmente, se busca que se mantenga esta tradición para evitar que este bordado legendario se marchite.