Capturando momentos efímeros para convertirlos en eternos a través de la foto
Detrás de cada imagen que evoca nostalgia, alegría o incluso tristeza, existe una intención, una mirada que busca inmortalizar lo fugaz.
MÉRIDA, Yucatán.- En un mundo donde las palabras a veces no logran expresar lo que sentimos o lo que percibimos, las imágenes se han convertido en un vehículo poderoso para contar historias.
La fotografía, ese arte que muchos consideran la intersección perfecta entre lo visual y lo emocional, ha transformado no solo la manera en que miramos la realidad, sino también la forma en que la recordamos y entendemos.
Para quienes han crecido en la era digital, la fotografía parece algo cotidiano, tan simple como apretar un botón en el teléfono móvil. Sin embargo, detrás de cada imagen que evoca nostalgia, alegría o incluso tristeza, existe una intención, una mirada que busca inmortalizar lo fugaz, lo momentáneo. Es ahí donde radica el poder de la fotografía: capturar un instante efímero y convertirlo en eterno.
En Mérida, el estudio “Pitahaya Fotografía” cumplió 10 años de capturar momentos que van desde la algarabía de cumpleaños hasta sesiones fotográficas en familia, expresó el fotógrafo Alejandro Xacur.
No se trata de la foto tradicional, sino de algo más espontáneo como fiestas infantiles, bautizos, y eso le sigue gustando a la gente. La gente sigue imprimiendo sus fotos o bien las guardan en un disco duro, y esas imágenes perduran toda la vida; sus hijos se lo van a agradecer mucho.
Cada imagen que captura lleva consigo no solo el momento en sí, sino también las emociones y sensaciones de quienes lo viven. Es una manera de inmortalizar esos pequeños instantes que, de otro modo, se perderían en la vorágine del tiempo.
La eternidad en un click
El proceso de capturar una imagen, ese instante en el que el fotógrafo hace clic y detiene el tiempo, es una experiencia mágica. Cada fotografía tiene una historia que contar, una emoción que transmitir. 
El reto está en luchar contra la inmediatez del teléfono; entregar lo más rápido. De hecho, hemos integrado el video para reels en redes sociales.
Así, mientras las imágenes siguen acumulándose en nuestras galerías digitales y los álbumes familiares crecen, la fotografía continuará siendo ese medio silencioso, pero poderoso, que nos permite detener el tiempo y conservar lo efímero en nuestras memorias. Un arte que, en cada clic, transforma lo momentáneo en eterno.
