Artesano elabora lámparas en forma de casas mayas
Utiliza técnicas y materiales autóctonos como si fueran estructuras de una casa de paja de tamaño real
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MÉRIDA, Yucatán.- Pastor Aké, es un talentoso artesano de Yucatán, que ha cautivado a los amantes del arte y la cultura con sus impresionantes lámparas inspiradas en las casitas mayas tradicionales. Utilizando técnicas artesanales y materiales autóctonos, Don Pastor ha logrado recrear fielmente la belleza y el encanto de las casas mayas en forma de lámparas.
Indicó que al principio las elaboraba de papel maché, pero fue perfeccionando la técnica hasta que mejoró la estructura y diseño de esta llamativa artesanía, “es la palma de huano como se hace el techo de una casa normal, pero también hacemos lo de adentro, urdimos las hamacas y hacemos los banquillos”.
Las lámparas de Don Pastor Aké están meticulosamente elaboradas, utilizando todos los elementos que se encontraría en una casa maya real. Cada lámpara es una obra de arte única, que refleja la rica historia y cultura de Yucatán.
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“Yo hago igual las mesitas que están adentro. Lamentablemente, es un trabajo que se está perdiendo, los jóvenes no están dispuestos a dedicarse a esto, tal vez por la tecnología y el avance que hay entonces, por eso se van alejando, pero es algo que no se debe perder”.
Señaló que estas lámparas han ganado reconocimiento tanto a nivel local como nacional, y han sido exhibidas en diversas ferias de arte y eventos culturales en todo el país. Su trabajo ha sido elogiado por su autenticidad, creatividad y atención al detalle.
“El turismo se sorprende y les gusta porque de repente van a Uxmal o a Chichén Itzá y ven el paisaje de Yucatán a través de los pueblos entonces cuando ven las lámparas en forma de casas mayas enseguida lo relacionan y por eso es que se quieren llevar uno de recuerdo a sus ciudades o países de origen”, relató.
Tiempo de elaboración y costo
La elaboración de una casita de este tipo tarda entre tres y cuatro días y se manejan dos tamaños, la grande y la chica, que tienen un costo de 350 y 250 pesos, respectivamente. Vende estos artículos los domingos en el corredor artesanal que se instala en la Plaza Grande de Mérida.
