Anselma Chalé Euán, ejemplo del empoderamiento de la mujer maya en Xcunyá
Ha reconstruido en tres ocasiones su santuario meliponario y su jardín botánico, además es maestra de la medicina tradicional maya
MÉRIDA, Yucatán.- Su madre y su abuela curaban sus males con las plantas y con la miel, ahora con orgullo esta mujer destaca su descendencia de chamanes, parteras y médicos tradicionales mayas. Se trata de Anselma Chalé Euán quien es ejemplo del empoderamiento de la mujer rural.
Vive en Xcunyá, comisaría de Mérida y desde pequeña comenzó su interés por lo desconocido. Su conocimiento ancestral lo aprendió de sus abuelos y un tío dedicado las sanaciones espirituales, sin embargo, en una sociedad marcada por el machismo y las restricciones impuestas a las mujeres, sus aspiraciones de convertirse en doctora fueron desvaneciéndose.
Aprendí a observar y entender la naturaleza, a comprender la importancia de lo que tenemos en nuestro entorno. Me di cuenta que poco a poco te vas dando cuenta de cómo te superas, las mujeres de hoy en día ya trabajan la abejita melipona cuando antes no, ya se liberan un poquito más de la casa
A pesar de haber visto destruido su meliponario en tres ocasiones debido a fenómenos naturales, doña Anselma no se ha dado por vencida y considera que la Madre Tierra es su principal aliada junto con sus abejas para su conocimiento ancenstral.
“Ya no es como antes, nosotras ahora ya no nos dejamos, tenemos una visión más amplia. Hemos cortado la cadena de que solo los hombres lo podían hacer y las mujeres no, hoy en día los hombres nos respetan, saben que somos el pilar de la casa y en el caso de las sanaciones hay mujeres quienes estamos elegidas para eso”, respondió.
Respeto a la abeja melipona y a la Madre Tierra
Con su conocimiento y sabiduría, Anselma se ha convertido en una referente, no solo para los habitantes de Xcunyá, sino también para otras comunidades cercanas que recurren a ella cuando los métodos modernos no logran aliviar sus dolencias.
“Parte fundamental de nuestro ecosistema son las abejitas meliponas, una abejita ancestral que nos lo dejaron nuestros abuelos, las plantas tienen propiedades curativas y las abejitas también sanan por su miel y por el sonido de sus alitas, hay que cuidar toda la naturaleza”, expresó.
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Hoy en día, el trabajo de doña Anselma ha sido reconocido más allá de Xcunyá. Ha sido invitada a participar en conferencias y eventos sobre medicina tradicional y conservación de la biodiversidad, y su labor con las abejas meliponas ha sido destacada en estudios y proyectos enfocados en la sustentabilidad.
Con su trabajo, no solo preserva un legado ancestral, sino que abre camino para que las futuras generaciones de mujeres rurales tengan más oportunidades de liderazgo y empoderamiento, demostrando que a pesar de las adversidades, la resistencia y el conocimiento pueden florecer.
