Síguenos

Maestra yucateca dice adiós tras 72 años de carrera, esta es su historia

Zizi Tamayo se despidió de ser maestra después de más de 70 años dedicados a la enseñanza de cientos de niñas y niños

Por: Posta Redacción

MÉRIDA, Yucatán.- Con 93 años, Zizi Tamayo Sobrino, maestra ilustre de Yucatán, pasó la mayor parte de su vida dedicada a la educación, hasta el pasado mes de diciembre cuando se despidió después de 72 años de carrera, dejando un importante legado que ya quedó escrito con letras de oro.

Su historia comenzó el 2 de septiembre de 1951 al salir de la Escuela Normal “Rodolfo Menéndez de la Peña” y de inmediato comenzó a trabajar en las aulas enseñando a cientos de niñas y niños.

Fachada escuela normal superior

Como maestra estuvo frente a grupo cerca de 16 años, otros 20 años se desempeñó como directora y los últimos 36 años de su carrera fue supervisora, labor que realizó hasta el pasado 16 de diciembre de 2023.

La maestra Zizi, hija de un comerciante y un ama de casa, asegura que una de sus más grandes satisfacciones es ver a muchos de sus alumnos convertidos en profesionistas, doctores, sacerdotes o abogados.

Te puede interesar: Universidades de Yucatán reconocidas por su labor por el medio ambiente

Retos en su carrera 

Entre las anécdotas que vivió a lo largo de siete décadas de trabajo, recuerda los retos que ha enfrentado, como cuando llegó a la escuela “Mauro López” en el municipio de Mocochá, cuando recibió un encargo que la marcaría de por vida.

“Cuando me comisionaron para aumentar la matrícula escolar de la escuela “Mauro López”, nunca me imaginé que sería uno de los retos más importantes de mi vida, ahí puse en práctica todos mis conocimientos adquiridos en la Escuela Normal y los valores que me inculcaron en casa”, señaló.

Zizi Tamayo, 

Maestra.

 

Escuela Mauro López en Mocochá, Yucatán

Con clases de educación física y artística, así como en el uso de instrumentos musicales y otras actividades llamó la atención de los padres de familia y fue así como logró pasar de 10 a 90 alumnos

Con lágrimas en los ojos, la maestra expresó que tuvo que jubilarse por motivos de salud, pues a pesar de su avanzada edad esto nunca fue impedimento para realizar su labor en las distintas escuelas para las que trabajó.


“Me retiro con la frente en alto, orgullosa de todo lo que he dedicado en más de setenta años de mi vida a la educación. Es una satisfacción haber cumplido con mi propósito desde el primer día que entré en un aula, enseñar con amor, respeto y honestidad. Hoy cedo el paso a la nueva generación de maestras y maestros que, al igual que yo, transformarán la vida de sus alumnas y alumnos”, concluyó.