La Uady informa sobre el uso de 'vapers' y su impacto en la salud
Estudiantes de Centro Escolar 'Antonio Betancourt Pérez' participaron en las actividades de Prevención de Adicciones que realiza la Uady
MÉRIDA, Yucatán.- Estudiantes de Centro Escolar “Antonio Betancourt Pérez” pudieron saber sobre el impacto a la salud por el consumo de los cigarros electrónicos, su venta ilegal, así como su historia en un foro realizado en el marco de las actividades de Prevención de Adicciones que durante mayo realiza la Uady.
Durante la conferencia “Mitos y realidades del consumo de vapers” , Nahomi Trejo Várguez, responsable del Programa Institucional Espacio 100% Libre de Humo de Tabaco y Emisiones de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady), alertó sobre que el vapor producido por estos dispositivos contiene al menos 33 componentes que están ocultos y son peligrosos para la salud y puede tener efectos adversos en el organismo. Además, señaló que muchos de los aromas utilizados pueden contener sustancias químicas que dañan a los pulmones y el sistema cardiovascular.
Un estudio del 2022 indicó que quienes intentaron dejar de fumar a través del vapeo arrojaron que el 81 por ciento regresó al cigarro combustible, el 2 por ciento se mantuvo con el vapor, el 12 se convirtieron en fumadores duales y solo el cuatro por ciento cesó su consumo
Historia del vapeo
Al relatar la historia del vapeo, la especialista dijo que esos dispositivos se usan desde los años sesenta cuando Herbert A. Gilbert inventó un artefacto mecánico que tenía por función sustituir el consumo del cigarrillo tradicional, en ese momento no se contaba con la tecnología adecuada y la patente quedó en archivo.
Agregó que el cigarrillo electrónico moderno fue introducido en 2003 por el farmacéutico chino, Hon Lik, quien utilizaba una batería para calentar un líquido con nicotina que producía un vapor que se podía inhalar y su intención era ayudar a las personas a disminuir el consumo dicha sustancia.
“Desde el punto de vista en ingeniería y diseño, este dispositivo revolucionó la industria del consumo de nicotina a través de vapor”, señaló.
Nahomi Trejo explicó que a pesar de los daños que ocasiona y de la escasa regulación sanitaria, la popularidad del vapeo ha crecido rápidamente en los últimos años y cada vez más personas caen en la creencia de que son artefactos seguros y lo utilizan como alternativa a fumar cigarros, también impulsado por la comodidad y la rentabilidad de los mismos, así como por la amplia gama de sabores disponibles.
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Por último, aseveró que la mayoría de los vapeadores provienen del mercado negro e ilegal, y aunque se legalice “no se debe confundir lo legal con lo saludable”.