¿Cómo están hechas las Casas Mayas?
Las viviendas mayas, construidas con madera, bejucos, palma, zacate y tierra, son una maravilla arquitectónica que forma parte de un paisaje cosmogónico único.
MÉRIDA, Yucatán.- Las casas mayas, en las épocas precolombinas, presentan una fascinante diferencia respecto a las construcciones modernas. Estas viviendas no solo reflejan la adaptación al entorno natural, sino que también son una manifestación de la rica cultura y el conocimiento profundo de los mayas sobre su medio ambiente.
Las casas mayas se construían principalmente con materiales locales. En las regiones bajas y cálidas, como la Península de Yucatán, se utilizaban madera y palma para la estructura, y estucos de cal para revestir y proteger las paredes.
La arquitectura vernácula, en este contexto, se refiere a un tipo de construcción tradicional que surge como una respuesta lógica a las condiciones del entorno natural y los recursos disponibles, sin la intervención de arquitectos formales pero con soluciones espaciales y morfológicas altamente efectivas.
Arquitectura de la casa maya
La estructura de las casas mayas típicamente consistía en un solo cuerpo de forma elíptica, rectangular con esquinas redondeadas, o rectangular. La vivienda se erigía sobre una base de troncos o piedra, y se cubría con palma o paja.
La ventilación cruzada era esencial para mantener el interior fresco, y las puertas situadas en los tramos largos de la casa permitían una adecuada circulación del aire.
Distribución del Espacio
El solar, el terreno residencial de la comunidad maya, se divide tradicionalmente en tres partes funcionales.
- La primera parte alberga la vivienda
- La segunda se destina a la cocina, comedor, molienda y lavado
- La tercera se usa para el huerto y la cría de animales de traspatio
La casa se sitúa al frente del solar, alineada con la vialidad, y suele estar rodeada por una albarrada que delimita el terreno.
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Las casas, que miden aproximadamente 4.5 metros de ancho, 8 metros de largo y 4.5 metros de altura, se construyen con dos pares de postes principales.
Estos postes sostienen vigas paralelas al eje de la casa, y otras vigas transversales que aseguran la estabilidad de la estructura, el piso se compone de capas de piedra de diferentes tamaños, con un acabado final de tierra o sascab apisonado.
Conocimiento transmitido de generación en generación
Las técnicas constructivas de las casas mayas son el resultado de un conocimiento transmitido de generación en generación, a menudo de forma oral y práctica. Desde una edad temprana, los niños participan en la recolección y preparación de materiales, así como en el proceso de construcción, aprendiendo así las técnicas tradicionales.
El uso de madera y hojas de palma demuestra una adaptación eficiente al clima, amortiguando cambios de temperatura y humedad. Las pendientes del techo minimizan la filtración de agua, y el apisonado de sascab permite una adecuada filtración de humedad. Además, la vegetación circundante contribuye a la sombra y confort del entorno.
A pesar de la riqueza de la arquitectura vernácula maya, la transmisión del conocimiento sobre técnicas constructivas enfrenta desafíos. Cada vez hay menos individuos que dominan estos saberes ancestrales, que incluyen la selección y preparación de materiales, y las técnicas de construcción.
Estos conocimientos son esenciales no solo para la preservación de las casas tradicionales, sino también para mantener viva una parte importante del patrimonio cultural maya.
La adaptación al medio ambiente, el uso de materiales locales y la transmisión del conocimiento a través de generaciones subrayan la riqueza de esta tradición constructiva, que sigue siendo un pilar fundamental del patrimonio cultural maya.